“Estamos viendo ríos alcanzar máximos históricos, localidades inundadas, auténticas catástrofes familiares por la pérdida de negocios y enseres personales, y por ello es un buen momento para recordar que Ávila no dispone de un mapa de zonas inundables actualizado que recoja las nuevas zonas de expansión de la ciudad, lo que supone un claro riesgo para los ciudadanos”.
Una advertencia y una petición que vuelve a producirse desde el grupo municipal de Izquierda Unida que desde el año 2007 viene reclamando una herramienta “siempre en elaboración” critica ante la última de las respuestas obtenidas en sede municipal. “En el año 2007 el Equipo de Gobierno del Partido Popular apuntó su compromiso para elaborar un nuevo mapa de zonas inundables en el municipio, en especial en la ribera del río Chico”. Una promesa “y un deber, como es el disponer de todas las herramientas que sean necesarias en la seguridad ciudadana, que ha quedado olvidada por un Equipo de Gobierno que ha adoptado una posición de absoluta dejadez y que sigue esperando que sean otras administraciones las que hagan su trabajo” señala Montserrat Barcenilla.
Recientemente el grupo municipal de Izquierda Unida ha vuelto a llevar a Junta de Gobierno esta reclamación, recibiendo como respuesta desde el Partido Popular “que se está elaborando”. Un planteamiento “de nuevo sin plazos y demasiado pobre teniendo en cuenta que han pasado ocho años de un compromiso que va más allá de promesas electoralistas, pues afecta a la seguridad de los abulenses”. Recuerda la portavoz de Izquierda Unida las numerosas inundaciones en lugares de toda España en los que jamás se pensó que pudieran ocurrir y que en muchos casos se agravan “por los malos planteamientos urbanísticos”.
Situaciones “que nos pueden tocar a nosotros tras la profunda transformación que ha sufrido Ávila, especialmente en la zona sur de la ciudad, y para las que no estaríamos preparados”.
Para Montserrat Barcenilla “es preciso que el Partido Popular se tome en serio esta herramienta. Con la nueva fisonomía de la ciudad debemos conocer las nuevas probabilidades de riadas, inundaciones y la adecuación de los protocolos para afrontar cualquier situación de emergencia, ya que el plan vigente no contempla las modificaciones que se han producido en la ribera del río Chico y alrededores, las nuevas viviendas de la zona sur o las nuevas instalaciones deportivas de Sancti Spíritu” señala.
“No tenemos por qué esperar a que otras administraciones nos hagan el trabajo”-concluye.
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