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PP y PSOE: la teoría del todo y la nada
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PP y PSOE: la teoría del todo y la nada

martes 03 de febrero de 2015, 13:21h

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El todo o la nada, o me quieres o me odias. Y entre amores perros y riñas públicas, lealtades institucionales-aseguran desde IU criticando los pactos sistemáticos de la derecha con el PSOE.

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Todo sea por las ‘prioridades y preocupaciones’ de los ciudadanos, lanzados a la calle cual marabunta reclamando como prioridad la puesta en marcha de la cadena perpetua -aquí pueden añadir ustedes todos los adjetivos que quieran, como revisable o similares, aunque seguirá siendo lo mismo- como una necesidad urgente de este país. Por encima del paro, la corrupción, los desahucios, la solución a la hepatitis C...

Ya saben, menudencias comparado con este asunto. Ya lo decía el CIS, esa encuesta a la que acudimos cuando nos interesa. Cuando no, está cocinada.

Porque PP y PSOE vuelven a poner en marcha eso que tanto gusta a los populares cuando gobiernan y que no es otra cosa que la lealtad institucional. Vamos, un cheque en blanco desde el que revestir como progresistas y consensuadas las medidas de derechas. Y en esto el PSOE les ha hecho un traje a medida.

Se lo pusieron en bandeja con la reforma del artículo 135 de la Constitución -ya saben, ese que dice que la prioridad son los bancos por encima de las personas- y ahora son ellos los colaboradores de esta nueva historieta en esta ‘Teoría del todo’ en la que Pedro Sanchez vuelve a ser ese personaje secundario capaz de alternar una imagen de socialismo modernista, de valores republicanos, alma de izquierdas pero brazo ejecutor de derecha. El ‘todo’, y el capital, bien merecen el esfuerzo.

Y alaba la derecha esa lealtad institucional. Una lealtad que ha permitido apoyar medidas como esta cadena perpetua, el artículo 135 de la Constitución o perpetuó la monarquía en el poder sin refrendarlo antes si era o no lo que querían los ciudadanos. Sin embargo esa lealtad institucional no permite apoyar medidas que frenen los desahucios, solucionen los problemas en la sanidad como la Hepatitis C, impidan el despido casi libre y la depreciación salarial, pongan freno a la pobreza energética, solucionen de una vez por todas los vaivenes en las leyes educativas... La lealtad institucional es el TODO, menos cuando los problemas son los que afectan a los ciudadanos. Entonces es la NADA.

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