La Junta de Castilla y León ha ampliado las subvenciones destinadas al relevo generacional de trabajadores autónomos, permitiendo que aquellos cuya actividad principal se desarrolle en un vehículo también puedan beneficiarse. Además, se ha extendido el periodo para la transmisión del negocio, permitiendo hasta cuatro meses entre el cierre y la nueva apertura. Esta modificación busca facilitar la continuidad de actividades productivas y atender las necesidades emergentes del autoempleo, especialmente en áreas rurales. Las ayudas pueden alcanzar hasta 20.000 euros por beneficiario, dependiendo de diversos factores como el perfil del nuevo autónomo y la ubicación del negocio. El plazo para presentar solicitudes también será ampliado próximamente.