WWF denuncia que ya son diez los linces ibéricos muertos por atropello este año, la cifra más elevada de los últimos años, por lo que reclama a las administraciones medidas correctoras para frenar la “mayor causa de mortalidad no natural para esta especie”.
Sólo en la semana pasada se conocieron dos atropellos mortales de linces, uno perteneciente a la población de Doñana y el otro de Sierra Morena - señala esta organización en un comunicado donde denuncia “la total inacción de las autoridades competentes, principalmente el Ministerio de Fomento” ante este “grave problema” de los atropellos.
Es “especialmente grave” el último atropello de un lince de la población de Sierra Morena en Andújar (Jaén) puesto que se trata del tercero que muere atropellado este año en el tramo de la autovía A-4 comprendido entre los kilómetros 305 y el 315-señalan.
Por ello WWF reclama a Fomento que arregle el vallado perimetral de esta autovía, una actuación que califica de “sencilla y de bajo coste” al tiempo que opinaba que “la falta de actuación en este punto es una muestra evidente del absoluto desinterés del Ministerio de Fomento por solucionar este problema”.
También ha recordado que el pasado 14 de marzo se constituyó- no sabemos si para acallar las voces críticas- un grupo de trabajo en Andalucía formado por Fomento, ADIF, WWF y las consejerías de Obras Públicas y de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía para buscar soluciones a los atropellos de linces, “muy numerosos en estos últimos dos años” que “no ha vuelto a reunirse y las autoridades no han tomado ninguna medida para frenar la sangría de los atropellos”.
Además de esta “inacción” de Fomento y del grupo de trabajo andaluz, WWF denuncia también que la Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha “ha incumplido su compromiso” de crear una mesa de trabajo sobre los atropellos de linces.
Esta organización recuerda que la mortalidad por atropello “lastra los esfuerzos” para establecer una población estable de lince ibérico en Castilla-La Mancha, por lo que exige a las administraciones “que se tomen medidas urgentes para que acabe este fatídico conteo de linces”.
“Con cada lince ibérico que muere atropellado se tiran por la borda muchos esfuerzos e inversiones públicas, tanto nacionales como europeas, que se han dedicado y se dedican en la actualidad a la conservación de esta emblemática y amenazada especie”, concluye WWF.